martes, 22 de mayo de 2012

Para mi amigo Francis

Subida Pico de la Estrella, 2009
     
      Uno de mis primeras entradas de este blog se la quiero dedicar a un amigo y compañero de fatigas ciclistas, que recientemente ha cumplido años. ¡Felicidades campeón!
      Y nada mejor para ello, comentar uno de los mejores momentos, para mí, de la práctica del deporte, que es, sin duda, la recuperación gastronómica post-esfuerzo. En homenaje a Francis, quisiera referirme a uno de los mayores festivales gastronómicos post-competición que nos dimos, tras la subida al Pico de la Estrella en la serranía de Berja durante la marcha del mismo nombre celebrada en otoño de 2009.
      En primer lugar quisiera recordar las horas previas a la comida, que comenzaron con una subida ¿neutralizada? al merendero de Castala, donde alguno, llegó ya con el hígado en la boca y las piernas duras como piedras, jejejeje; y después una cronoescalada de aprox. 20 km,con un desnivel de 1600 m. hasta llegar al pico de la Estrella a casi 2000 m de altitud. Subida tendida y constante, de esas que te va comiendo las fuerzas poco a poco, pero como siempre ¡a muerte desde el principio!
      La marcha terminó con un descenso rápido hasta el pabellón deportivo de Berja, una ducha reparadora y ¡ahora empieza lo bueno!



      Nos fuimos al mítico "Cahete", casa de comidas tradicional (la palabra restaurante no la encuentro adecuada) de la localidad almeriense de Berja, fundada en 1952. Entrar en este lugar es, ...uhmmm, como describirlo..., es viajar al pasado. Puedes comprobar perfectamente que nada ha cambiado desde los años 50, la misma barra, el mismo suelo, las mismas mesas, sillas, televisor con transformador de corriente, el mismo tío con bigote detrás de la barra, los mismos palillos para los dientes, en fin, toda una experiencia nostálgica. Quisiera destacar que, nada más sentarte, te ponen como aperitivo o "petit fours" una barra de pan y un trozanco de sobrasada para que te vayas sirviendo. Así que ya te imaginas como es el menú, sin duda alguna, contundente. Ni que decir tiene, que comimos de puta madre, buenas chuletas, patatas y buen vino. Como muestra del postre, dejo este precioso vídeo, en el que se puede apreciar la finura de los comensales. (Francis, perdona, pero no he podido descargar el sonido del vídeo, aunque vale más una imagen que mil palabras, jejejejeje)
      Se que no es la mejor manera de comenzar una andadura blogera, pero de la práctica deportiva hablaremos otro día. ¡Qué cumplas muchos más!

2 comentarios:

  1. Jajajaja, menos mal que has explicado el esfuerzo realizado, que si no a ver como explico yo comerme un flan con tanta ansia, la verdad que fue un momento inolvidable, por cierto me alegro de que no se escuche el audio jajaja, muchas gracias por la dedicatoria y a ver si repetimos un día de estos.
    P.D. A la semana siguiente de ese video fui a correr otra carrera a Dalias que tu no pudiste venir, y como sabes que está vecina con Berja pues ¿a ver si sabes donde comimos?

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